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viernes

San Lucas (18.1): Parábola del juez y la viuda

Después le enseñó con una parábola que era necesario orar siempre sin desanimarse:
«En una ciudad había un juez que no temía a Dios ni le importaban los hombres; y en la misma ciudad vivía una viuda que recurría a él, diciéndole: "Te ruego que me hagas justicia contra mi adversario".
Durante mucho tiempo el juez se negó, pero después dijo: "Yo no temo a Dios ni me importan los hombres, pero como esta viuda me molesta, le haré justicia para que no venga continuamente a fastidiarme".»
Y el Señor Jesucristo dijo: «Oigan lo que dijo este juez injusto. Y Dios, ¿no hará justicia a sus elegidos, que claman a él día y noche, aunque los haga esperar?
Les aseguro que en un abrir y cerrar de ojos les hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará fe sobre la tierra?».

Virgen de Medjugorje (Virgen de la Paz)

jueves

San Lucas (9.10): La multiplicación de los panes

Al regresar, los Apóstoles contaron a Jesús todo lo que habían hecho. El los llevó consigo, y se retiró a solas con ellos hacia una ciudad llamada Betsaida.
Pero la multitud se dio cuenta y lo siguió. El los recibió, les habló del Reino de Dios y devolvió la salud a los que tenían necesidad de ser curados.
Al caer la tarde, se acercaron los Doce y le dijeron: «Despide a la multitud, para que vayan a los pueblos y caseríos de los alrededores en busca de albergue y alimento, porque estamos en un lugar desierto». El les respondió: «Denles de comer ustedes mismos». Pero ellos dijeron: «No tenemos más que cinco panes y dos pescados, a no ser que vayamos nosotros a comprar alimentos para toda esta gente».
Porque eran alrededor de cinco mil hombres. Entonces Jesús les dijo a sus discípulos: «Háganlos sentar en grupos de cincuenta». Y ellos hicieron sentar a todos.
Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados y, levantando los ojos al cielo, pronunció sobre ellos la bendición, los partió y los fue entregando a sus discípulos para que se los sirviera a la multitud. Todos comieron hasta saciarse y con lo que sobró se llenaron doce canastas.

lunes

Santo Rosario

Para rezar el Santo Rosario, es conveniente tener un Rosario (preferentemente bendecido) en la mano, para ir siguiendo cuenta por cuenta, cada uno de los pasos.

1. Tomando el crucifijo del Rosario en la mano, comenzar haciendo la Señal de la Cruz y rezar el Credo o el Acto de Contricción.

2. Rezar 1 Padre Nuestro.

3. Rezar 3 Ave María y el Gloria.

4. Anunciar el primer misterio.

Los Lunes y Sábados: Misterios Gozosos. Los Martes y Viernes: Misterios Dolorosos. Los Jueves: Misterios Luminosos. Los Miércoles y Domingos: Misterios Gloriosos.

Se prosigue con la meditación de todo ese misterio y luego se reza un Padre Nuestro.

5. Rezar 10 Ave María y el Gloria.

6. Anunciar y meditar el segundo misterio y rezar un Padre Nuestro.

7. Rezar 10 Ave María y el Gloria.

8. Anunciar y meditar el tercer misterio y rezar un Padre Nuestro.

9. Rezar 10 Ave María y el Gloria.

10. Anunciar y meditar el cuarto misterio y rezar un Padre Nuestro.

11. Rezar 10 Ave María y el Gloria.

12. Anunciar y meditar el quinto misterio y rezar un Padre Nuestro.

13. Rezar 10 Ave María y el Gloria.

14. Rezar la Salve y, si lo desea, las Letanías de la Virgen.

A continuación se pueden rezar un Padre Nuestro, tres Ave María y un Gloria por las intenciones del Santo Padre.

Final:

† En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Oración: Letanías de la Santísima Virgen

(V). Señor, ten piedad.
(R). Señor, ten piedad.

(V). Cristo, ten piedad.
(R). Cristo, ten piedad.

(V). Señor, ten piedad.
(R). Señor, ten piedad.

(V). Cristo, óyenos.
(R). Cristo, óyenos.

(V). Cristo, escúchanos.
(R). Cristo, escúchanos.

(V). Dios Padre celestial.
(R). Ten misericordia de nosotros.

(V). Dios Hijo, redentor del mundo.
(R). Ten misericordia de nosotros.

(V). Dios Espíritu Santo.
(R). Ten misericordia de nosotros.

(V). Trinidad, Santa, un solo Dios.
(R). Ten misericordia de nosotros.

(V). Santa María.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Santa Madre de Dios.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Santa Virgen de las vírgenes.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre de Cristo.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre de la Iglesia.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre de la Divina Gracia.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre purísima.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre castísima.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre incorrupta.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre inmaculada.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre amable.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre admirable.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre del Buen Consejo.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre del Creador.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Madre del Salvador.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Virgen prudentísima.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Virgen digna de veneración.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Virgen digna de alabanza.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Virgen poderosa.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Virgen clemente.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Virgen fiel.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Espejo de Justicia.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Trono de la sabiduría.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Causa de nuestra alegría.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Vaso espiritual.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Vaso honorable.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Vaso digno de honor.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Vaso insigne de devoción.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Rosa mística.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Torre de David.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Torre de Marfil.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Casa de Oro.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Arca de la Alianza.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Puerta del cielo.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Estrella de la mañana.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Salud de los enfermos.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Refugio de los pecadores.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Consuelo de los afligidos.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Auxilio de los cristianos.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de los ángeles.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de los patriarcas.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de los profetas.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de los apóstoles.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de los mártires.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de los confesores.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de las vírgenes.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de todos los santos.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina concebida en gracia.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina elevada al cielo.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina del Santo Rosario.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de la familia.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Reina de la paz.
(R). Ruega por nosotros.

(V). Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo.
(R). Perdónanos, Señor.

(V). Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo.
(R). Escúchanos, Señor.

(V). Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo.
(R). Ten misericordia de nosotros.

Oración: Salve María

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia,
vida, dulzura y esperanza nuestra: Dios te salve.

A ti llamamos los desterrados hijos de Eva;
a ti suspiramos, gimiendo y llorando
en este valle de lágrimas.

Ea, pues, Señora abogada nuestra,
vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y, después de este destierro, muéstranos a Jesús,
fruto bendito de tu vientre.

¡Oh clementísima! ¡oh piadosa! ¡oh dulce Virgen María!.

Ruega por nosotros santa Madre de Dios,
para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.

Amén.

Oración: Gloria

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Como era en un principio, ahora y siempre.
Por los siglos de los siglos.
Amén.

Oración: Ave María

Dios te salve, María, llena eres de Gracia, el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.

Oración: Padre Nuestro

Padre Nuestro que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino,
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal.
Amén.

Oración: Acto de Contricción

Pésame, Dios mío, y me arrepiento
de todo corazón de haberos ofendido.

Pésame por el infierno que merecí y por el cielo que perdí, pero mucho más me pesa porque pecando ofendí
a un Dios tan bueno y tan grande como Vos.

Antes querría haber muerto que haberos ofendido;
y propongo firmemente no pecar más
y evitar toda las ocasiones próximas de pecado.

Amén.

Oración: Credo

Creo en Dios, Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Y en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,
y nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato; fue crucificado, muerto y sepultado.
Descendió a los infiernos; al tercer día resucitó
de entre los muertos; subió a los cielos y
está sentado a la derecha de Dios Padre todo poderoso; desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia Católica,
la comunión de los Santos, el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne, y la vida eterna.
Amén.

domingo

Oración: La Coraza de San Patricio

Me levanto hoy
Por medio de poderosa fuerza,
la invocación de la Trinidad,
Por medio de creer en sus Tres Personas,
Por medio de confesar la Unidad,
Del Creador de la Creación.

Me levanto hoy
Por medio de la fuerza del nacimiento de Cristo y su bautismo,
Por medio de la fuerza de Su crucifixión y su sepulcro,
Por medio de la fuerza de Su resurrección y asunción,
Por medio de la fuerza de Su descenso para juzgar el mal.

Me levanto hoy
Por medio de la fuerza del amor de Querubines,
En obediencia de Ángeles, En servicio de Arcángeles,
En la esperanza que la resurrección encuentra recompensa,
En oraciones de Patriarcas,En palabras de Profetas,
En prédicas de Apóstoles, En inocencia de Santas Vírgenes,
En obras de hombres de bien.

Me levanto hoy
Por medio del poder del cielo:
Luz del sol,
Esplendor del fuego,
Rapidez del rayo,
Ligereza del viento,
Profundidad de los mares,
Estabilidad de la tierra,
Firmeza de la roca.

Me levanto hoy
Por medio de la fuerza de Dios que me conduce:
Poder de Dios que me sostiene,
Sabiduría de Dios que me guía,
Mirada de Dios que me vigila,
Oído de Dios que me escucha,
Palabra de Dios que habla por mí,
Mano de Dios que me guarda,
Sendero de Dios tendido frente a mí,
Escudo de Dios que me protege,
Legiones de Dios para salvarme
De trampas del demonio,
De tentaciones de vicios,
De cualquiera que me desee mal,
Lejanos y cercanos,
Solos o en multitud.

Yo invoco éste día todos estos poderes entre mí y el malvado,
Contra despiadados poderes que se opongan a mi cuerpo y alma,
Contra conjuros de falsos profetas,
Contra las negras leyes de los paganos,
Contra las falsas leyes de los herejes,
Contra obras y fetiches de idolatría,
Contra encantamientos de brujas, forjas y hechiceros,
Contra cualquier conocimiento corruptor de cuerpo y alma.

Cristo escúdame hoy
Contra filtros y venenos, Contra quemaduras,
Contra sofocación, Contra heridas,
De tal forma que pueda recibir recompensa en abundancia.

Cristo conmigo,
Cristo frente a mí,
Cristo tras de mí,
Cristo en mí, Cristo a mi diestra,
Cristo a mi siniestra,
Cristo al descansar,
Cristo al levantar,
Cristo en el corazón de cada hombre que piense en mí,
Cristo en la boca de todos los que hablen de mí,
Cristo en cada ojo que me mira,
Cristo en cada oído que me escucha.

Me levanto hoy
Por medio de poderosa fuerza, la invocación de la Trinidad,
Por medio de creer en sus Tres Personas,
Por medio de confesar la Unidad,
Del Creador de la Creación.